La automatización y la Inteligencia Artificial están aquí para quedarse y, de hecho, se podría decir que se trata de tecnologías pensadas para facilitarnos procesos y hacer nuestra vida profesional más fácil, librándonos de tareas rutinarias sencillas fácilmente automatizables. Basta con echar un vistazo, sin ir más lejos, a lo complicado que era hacer o gestionar una página we b hace apenas unos años, en comparación con las muchas alternativas existentes en la actualidad.
En este sentido, cabe preguntarse qué pasa con el perfil del programador tradicional, el de toda la vida. La realidad es que las empresas buscan ya perfiles que aporten valor añadido, y no tanto perfiles de programadforess al uso, De hecho, tendencias como el NoCode o el LowCode van imponiéndose poco a poco en muchas organizaciones, eliminándose con ellas la necesidad de codificación a la hora de crear desarrollos informáticos o digitales. Las ventajas son evidentes: menores tiempos de desarrollo, sencillez de uso y transformación o cambio, flexibilidad a la hora de publicar, reducción de costes…
Las nuevas maneras de desarrollar productos y procesos digitales no exigen ya tantos conocimientos especializados de codificación: el valor añadido está ya en la experiencia aportada y en los conocimientos prácticos y operativos de liderazgo de proyectos y grupos de trabajo, por lo que vamos, casi sin duda hacia perfiles profesionales híbridos.