En un contexto de escasez de perfiles cualificados, la batalla por retener el talento está a la orden del día, y muchas empresas la perderán si no reformulan su estrategia. ¿La clave? Ofrecer algo más que una carrera profesional o un buen sueldo.
Ahora mismo, la mitad de los CIO españoles considera que la fuga de talento es un problema importante. Hablamos de una media de rotación del 17% en el sector, con picos del 45% en función del tipo de perfil o servicio. Como en todo, también aquí la pandemia lo ha cambiado todo, al acelerar tres tendencias que son clave entre los profesionales del sector TIC, además de todo lo que se refiere a la remuneración por el trabajo o servicio. Nos referimos a:
- El propósito.
- La flexibilidad.
- Las nuevas skills.
Los perfiles más cualificados quieren involucrarse en programas o proyectos que les aporten sentido, además de mejoras salariales o de estatus, lo que va unido a una mayor querencia por flexibilidad y posibilidades de conciliación con la vida personal, y la posibilidad de acceder a formaciones permanentes e incrementales sobre tecnologías o aspectos relacionados con su especialidad.
Hay, de hecho, tres aspectos clave en los que trabajar: diseñar espacios de trabajo dirigidos a las personas, es decir, no a meros números o trabajadores; proporcionar condiciones de trabajo que aporten algo a la experiencia vital, más allá del crecimiento laboral, y ser capaces de ofrecer una respuesta emocional positiva a las necesidades de la persona.