El estudio, de título La oficina virtual: nuevas reglas para una nueva era de trabajo, encargado por VMware a la firma especializada en investigaciones de mercado, Vanson Bourne, se llevó a cabo en julio y agosto de 2021, con la participación de 7.600 personas, 195 de ellas españolas.
El 72% de las empresas encuestadas ya han implementado distintas medidas de supervisión.
Por lo visto, el 72% de las empresas encuestadas ya han implementado (o iban a hacerlo de forma inmediata) varios tipos de medidas de supervisión para sus empleados con el fin de evaluar fehacientemente la productividad real del personal que trabaja a distancia o con modelos híbridos.
Entre dichas medidas, encontramos la supervisión de los emails corporativos (41%), de la navegación por Internet de los empleados (34%), el uso de las herramientas de colaboración (41%), la videovigilancia (22%), el rastreo de la atención personal a través de sistemas de cámaras web (24%) y el software de registro de pulsación de teclas en el teclado (27%).
No obstante, casi un tercio de las empresas que efectivamente han empezado a supervisar a sus empleados en remoto dicen haber observado un “aumento” o un “aumento considerable” en la rotación de personal.
Un tercio de las empresas dicen haber observado un “aumento considerable” en la rotación de personal.
En cuanto a los empleados, el 82% de ellos reconoce que, después del periodo de transición al trabajo en remoto, sus empleadores se fijan sobre todo en el rendimiento, y no tanto en otros indicadores convencionales (p. ej., el tiempo que pasamos en la oficina). De hecho, el 83% afirma que la tecnología que posibilita su teletrabajo hace que trabajen con mayor eficiencia.
Asimismo, casi el 80% de las empresas se ha visto obligada a diseñar nuevos modos para medir la productividad de su plantilla. Aquí, hay ejemplos para todos los gustos: desde soluciones centradas en el rendimiento, por ejemplo las reuniones periódicas con la dirección para evaluar la carga de trabajo (49%), hasta el análisis de resultados y expectativas (53%), pasando por el uso de nuevos programas diseñados específicamente para la gestión de proyectos (51%). De hecho, el 64% de las organizaciones que han participado en la encuesta reconoce que, en la medición de la productividad, la transparencia es clave. En este sentido, casi el 30% de los empleados dice desconocer si en su empresa se han implementado dichos sistemas de supervisión.