Aunque se trata de una tendencia en toda Europa, España destaca como uno de los países que más confía en los productos reacondicionados, con un índice de penetración del 5%.
Comparativamente con otros países de la UE, los consumidores y consumidoras españolas se sitúan como ejemplo de adopción de los nuevos modos se consumo sostenible, con un 5% de penetración frente al resto de Europa, donde la penetración oscila entre el 2% y el 5%, mientras que en otros mercados afines, como EE.UU. y Japón, se mantiene todavía por debajo del 2%.
Por ejemplo, si en Europa la importancia del mercado de tecnología reacondicionada alcanza el 12% (un aumento tres puntos porcentuales desde el 9% de 2022) en España alcanza ya el 14%.
Poco a poco, el mercado va aceptando la idea de la tecnología reacondicionada ofrece altos estándares de garantía y calidad, y no solo precios competitivos, ampliándose poco a poco la importancia de fomentar una cultura de consumo distinta, centrada, siempre que sea posible, en un catálogo de productos reacondicionados más amplio que los smartphones, los cuales aún que representan el 85% de las ventas de productos tecnológicos reacondicionados en nuestro país.